Conseguir que un niño obezca, no es tarea fácil y exige un gran esfuerzo por parte de todas las personas implicadas en su educación.
En este proceso de aprendizaje, por parte del niño y del educador, intervienen muchos factores cómo la personalidad del niño y el estilo educativo de los padres.
Obedecer no es sólo conseguir que el niño responda a nuestras demandas. Obedecer es saber poner límites claros y enseñarles a convivir deacuerdo a unas normas.
¿Pero….cómo establecer límites claros?

–Usar lenguaje adaptado a las necesidades del oyente (tenemos que asegurarnos de que a nivel comprensivo es capaz de entender todas las palabras que empleamos.
En niños con necesidades educativas especiales, será de gran utilidad sistemas de apoyo comunicativos como son el uso de pictogramas y el uso de gestos de apoyo a la comunicación.
-Mensajes claros y concisos. Ej: Decir: “Quiero que estés sentado escuchando” en lugar de : “Te estás portando mal”.
-Mensajes en positivo. Ej: “Si terminas toda la tarea vamos a tener más tiempo para jugar” en lugar de “Cómo no termines a tiempo te quedarás sin jugar”
Además….
- Nunca dar una instrucción si no estamos seguros de que el niño la va a seguir. Ej: Si estamos ante una rabieta, deberemos esperar a que pase y buscar un momento en el que el niño se encuentre en calma para demandarle la tarea. Si es necesario, le ayudaremos para que la complete con nuestra ayuda. Lo importante es reforzarle diciéndole lo bien que lo ha hecho, cada vez que nos obedezca.
- Pasar tiempos juntos haciendo tareas que sean divertidas para el niño. El emparejamiento, es la clave de una buena cooperación. Pasar tiempo juntos, es una buena manera de establecer un vínculo con el niño. Cada vez que castigamos o hacemos uso de la reprimenda verbal, estamos perdiendo nivel de emparejamiento con el niño.
- Usar actividades, a ser posible conjuntas u objetos para reforzar al niño y motivarle en el proceso de aprendizaje. Y tener en cuenta que habrá que ir cambiándolas con frecuencia para que no pierdan su valor como reforzadores.
- Ir aumentando el número de demandas muy progresivamente según el niño vaya respondiendo.
- Trabajar en estrecha cooperación con el entorno familiar. Ya que en ocasiones, existen dificultades de cooperación en el hogar que podrían interferir en el aula. Ej: un nivel muy bajo de exigencias en casa en comparación con el del contexto escolar, podría dar lugar a problemas en el aula. Por tanto la coordinación entre los dos contextos cuando existen problemas de falta de cooperación en general es clave.
